Y yo a mí de Elsa García

Hoy vengo a hablaros de un libro que me ha llegado a lo más profundo del corazón, una lectura llena de sentimientos, Y yo a mí de Elsa García ha sido una lectura apasionante, de la que no podía despegarme. 

La familia de Jota no es muy tradicional. 

Tiene una Yaya adorable que no es su abuela, pero que la quiere más que si lo fuera. 

Tiene una hermana que no comparte sangre con ella, pero sí colegio desde niñas. 

Tiene un hermano gay que podría llegar a ser su cuñado, porque resulta que es el auténtico hermano del que podría ser el hombre de su vida. 

A Enzo le ha engañado una mujer que no le merecía y ahora se ha quedado prendado de Jota. 

Pero es que Jota no quiere príncipes, porque ya amó a uno que aseguraba que ella era su princesa, pero sólo consiguió llenar su colorido mundo de sombras. 

Ahora tiene que decidir si Enzo merece un nuevo salto al vacío o no… literalmente. 


Jimena perdió a sus padres siendo demasiado joven, pero ganó una Yaya por el camino, además de a sus inseparables amigos Ga y Nit. 
Con mucho descaro y sin pájaros en la cabeza, aprendió tarde que el amor ciego a veces hace que te des golpes que duelen demasiado por caminar entre tanta oscuridad. Así que cuando el hermano de su querido Gael aparece en la ciudad consiguiendo despertar en ella más que deseo, prefiere no correr demasiado. 
Enzo ha llegado a Madrid con el corazón roto y algo de resentimiento hacia las mujeres, pero la luz de Jimena era un faro que no esperaba encontrar entre tanta sombra. Le da igual que ella parezca no querer a los hombres más que para divertirse, porque sabe que con él nunca se le borraría la sonrisa. 
Pero ¿podrá mantener siempre esa promesa?

Conoceremos a Jota una chica que muy joven se queda huérfana y su Yaya es la que se hace cargo de criarla y estar a su lado en el momento más duro de su vida, pero gano a una amiga (Nit) que es como una hermana para ella, y poco tiempo después llego a su vida Gael para quedarse para siempre. Los tres son amigos desde hace tiempo.

La historia comienza con el cumpleaños de Gael, donde lo van a dar todo, y esa misma noche Jota vuelve a encontrarse con Enzo (hermano de Gael) que ha vuelto de EEUU, y desde el momento que se vuelven a encontrar entre ellos ocurre algo, pero esta historia es diferente, de las que a mí me gusta, de las que el amor llega poco a poco. Nos adentros en la historia de la vida de Jota y la de sus amigos, porque Jota es de esas personas que tendrá los amigos justos, pero que son amigos de verdad, más bien son familia y quedan muy a menudo. Donde en cada encuentro Jota y Enzo cada vez se conocen más y cada vez están mas cerca el uno del otro, empezaran a estar a ratos solos, con más intimidad, donde el conocerse les unirá como nunca, pero no solo eso, si no contarse cosas de sus pasado, sobre todo el porqué Enzo vuelve de EEUU después de un desengaño y porque Jota no cree en los "príncipes azules", donde tengo que decir que en estos momentos el corazón se te encoge y te cabreas.

Pero en esta historia tenemos dos giros, y tengo que decir por mi parte que ninguno de los dos me esperaba, y que me partieron el corazón. El primero hará que el mundo de Jota se tambalee y vuelva el pasado con más fuerza, que los recuerdos sean duros y difíciles, sus amigos son incapaces de hacer algo por ella (aparte de estar a su lado), pero la peor parte se la lleva Enzo que está lleno de impotencia porque no sabe cómo sacar a su chica de ese momento y lo único que él quiere es estar a su lado, abrazarla y decirle que todo irá bien, que se puede apoyaren en él todo lo que quiera. Pero cuando no hemos salido de una ¡ZAS! llega ese MOMENTO,  que te quedas a cuadros porque no te lo esperas, y menos de ese personaje.

Lo que hará que nuestros personajes se planteen todo, lo que quieren, lo que siente, lo que necesitan, pero tengo que decir que en este momento les daba a los dos unas buenas collejas por las decisiones que toman, porque sí que es cierto que uno tiene que escuchar a su cerebro, pero también a su corazón, y tomar las decisiones en frió, lo que en este caso es todo lo contrario.  Pero sobre todo porque hacen lo contrario a lo que quieren.

Y ahora hablemos del FINAL, porque me haces esto Elsa ¿Por qué?.

Tengo sentimientos encontrados con el final, me explico, entiendo sobre todo una parte, la otra ni de coña me entra en la cabeza que haga eso, pero lo que llevo peor es ese sentimiento de impotencia, me gustaría decirles a los dos un par de cosas, ponerlos frente a frente y decirles: "Hijos de Dios, se que en el pasado lo habéis pasado mal, malas historias, pero podéis por una vez comportaros como ADULTOS y daros de cuenta lo que sentís el uno por el otro. 

Que si que la habéis jodido, los dos, que habéis abandonado a la primera, que no habéis luchado por este AMOR,  pero sé que no podéis ser felices el uno sin el otro, por una vez hablar, de dolor si, de lo que os pasa por la cabeza, pero por DIOS hablar de lo que os amáis"

Y esas últimas dos palabras, te rompen el corazón y te dejan con la boca abierta porque no puedes creer lo que estás leyendo, algo tan inesperado y que la autora esconde hasta la última frase. Y sigo sin supera ese final. 

La esta historia está contada por Jota mayormente, pero sí que hay capítulos desde el punto de vista de Enzo y Gael, me encanta que esta historia este contada por diferente personajes, porque esto hace que esta historia sea mucho más rica y que quieras seguir leyendo.  Jota se abre en canal al contar su historia, nos muestra sus sentimientos, su forma de ser y como lo paso en el pasado, un mujer fuerte, luchadora, loca y divertida, pero que lo de su familia es algo que no supera, pero hay algo peor en su vida, mejor dicho alguien, que le hizo creer en el amor y que de la peor manera entiende que el amor no es como lo cuenta Disney, que a veces es cruel, tóxico y malo. Lo mejor de Jota ver como se vuelve abrir al amor, a esas sensaciones y que se plantee que quiere mucho más que un rollo de una noche con un chico,.

Enzo es un personaje que desde el principio conecte mucho con él, y para que vamos a mentir, me "enamore" de él, un chico sencillo, sensible, dulce, cariñoso, que lo da todo, que quiere muchísimo a su hermano, pero con el corazón dañado por la traición. Pero ver su evolución ha sido algo maravilloso,  y siempre que recuerdo a Enzo siempre sonrío es de esas personas que solo les deseas cosas buenas por la persona que es.

Con Gael viviremos unos pocos capítulos, pero que capítulos, sobre todo en uno que le pasa algo ¡¡¡OMG!!! no paras de reír, pero la situación para el no es graciosa, Gael la próxima vez, ya sabes el pestillo a la puerta. Gael es lo que de verdad es ser un amigo, aquel que siempre esta a tu lado, en lo bueno pero sobre todo en lo malo, esa mano a la que aferrarte en los momentos que más nervioso estés, el hombro que llorar, esa persona que te escuchara durante horas para que te puedas desahogar, pero sobre todo ese tipo de personas que una vez entra en tu vida NUNCA se marchara de ella.

Elsa a sabido atraparme desde las primeras páginas con una Jota, feliz, sincera, loca, pero ante todo con su "familia", solo eres capaz de pasar página tras página para saber que depara a esta pequeña familia. Su forma de esconder esos dos giros es espectacular, pero al final hará que termines con la boca abierta, para terminar con la sensación de que has leído un libro como la vida misma, esa que estás viviendo tu, que cualquier cosa que le pasa a Jota te podría pasar a ti en cualquier momento. Y os puedo asegurar que ella junto a May Boeken son mis grandes descubrimientos de este 2018, dos autoras que sin ninguna duda seguiré leyendo.

En resumen, Y yo a mí es una historia de amor, de personas rotas que vuelven a creer en el amor, de corazones que sanan juntos, de familia, pero no de esa familia que te toca sino de la que uno escoge, de traición, dolor, superación, amistad, cariño, muerte, dolor, de recordar a los que ya no están, de risas, de viajar, de ver a las personas que quieres felices, de vivir momentos que siempre se quedarán grabados en tu corazón. Porque el amor nos mueve, sea del tipo que sea, porque amar significa sentir, y sentir significa que estás vivo.